Las fiestas de Badostáin de 1757

En  1757 se dictó un edicto que sustituía al fracasado de 1537 y que, en definitiva, reducían las celebraciones patronales a un solo día.

Se informaron de infracciones colectivas en algunos pueblos de Navarra (¡cómo no, en Badostáin!).

 

El libro Rincones de la historia de Navarra, de Florencio Idoate recoge:

“En Badostáin la cosa fue bastante gorda. Amonestados los mozos por el abad y el regidor Redín, por no tener música en segundo día de las fiestas de San Miguel, no les hicieron caso, antes bien se burlaron de ellos. Dice la información que los “mozos, ligados en carricadanza con sus pañuelos, cercando la casa de dicho abad, gritando con toda algaraza, anduvieron mucho rato por frente y por detrás de dicha casa”